Pero bueno, ya se sabe, para gustos colores...
Sin embargo, aunque no sepa comprender los conceptos abstractos de las obras modernas (un día vi un cuadro que simplemente estaba en blanco y valía una pasta...en serio...), de lo que sí entiendo algo es de sentimientos, y esta "performance" me ha tocado la fibra. Sin ser nada explícita y con la mínima expresión me ha hecho sentir e incluso soltar alguna lagrimilla (tal vez eso pretendía también el del cuadro en blanco o el de la fabada, emocionar a partir de muy poco...pero se ve que yo ya no llego a tanta madurez artística porque eso no me toca ni la fibra ni na...)
Os dejo la historia (visto en el blog "fromlab"):
"Esta es una historia de amor entre una pareja de artistas, Marina Abramovic y Ulay, que se conocían en el año 76 en Ámsterdam. Fue amor a primera vista. Tras varios años juntos, realizando diversas performances conjuntas, decidieron poner fin a su relación a través de una última performance titulada “Los amantes”. En ella, Marina y Ulay caminaron por los extremos de la Gran Muralla China para luego encontrarse, abrazarse y despedirse para siempre.
Nunca volvieron a verse en 23 años, hasta que un día, Marina, expone en el Moma su muestra “El artista está presente”, en la que mira durante un minuto y en silencio, a todos los que se sientan frente a ella. Todos los que participan son visitantes del museo, hasta que de pronto, el que se sienta frente a ella, es el mismo Ulay.
Sí, 23 años después, sin saberlo, el gran amor de su vida la mira fijamente durante 60 segundos.
El vídeo es impresionante"











